“No vamos en camino a la equidad”. Esa fue la gran conclusión que, en palabras de Ernesto Durán, coordinador del Observatorio sobre Infancia de la Universidad Nacional de Colombia, dejó el ‘Coloquio sobre Infancia 2015’, celebrado el pasado 15 y 16 de octubre en el edificio de posgrados de la Facultad de Ciencias Humanas de esta institución de educación superior.

“La pregunta del evento era cuál es el impacto de las políticas sociales sobre las inequidades en la infancia y la adolescencia, y la conclusión, basada en las intervenciones de los conferencistas invitados y el público asistente, es que hay que hacer varios correctivos a las políticas y, por tanto, no se está construyendo adecuadamente ciudadanía y democracia con nuestros niños, niñas y adolescentes”, señaló Durán.

Según lo manifestado por los asistentes al encuentro, los correctivos no son en el texto de las políticas, son en la implementación, y ello requiere un proceso mayor de veeduría. “A la sociedad civil nos corresponde vigilar y acompañar el proceso, pero realmente la ejecución de las políticas es responsabilidad del Estado. Además hay una pobre veeduría, no solo por parte de la sociedad civil, también de las organizaciones a las que les corresponde, como la Defensoría del Pueblo o la Procuraduría. También se habló de que muchas políticas son solo de coyuntura, es decir, lo que dura un gobierno, y una vez este acaba hay problemas de continuidad”, explicó Durán.

En el evento se hizo énfasis en las inequidades geográficas, interétnicas, intergeneracionales, de género y socioeconómicas y cómo afectan las diferentes etapas de la vida, desde la gestación hasta la adolescencia. De igual forma, se reflexionó acerca de cómo un factor como los servicios en vez de ayudar a superar estas inequidades las han acentuado, es el caso de la salud.

Por otro lado, se reconoció como un logro que existan políticas públicas como ‘De cero a siempre’, pero se llamó la atención sobre el hecho de que sean para grupos poblacionales específicos. “Hay un énfasis en la primera infancia, entonces se destinan muchos recursos y esfuerzos para esta, y eso ha llevado a que los escolares y adolescentes no se consideren suficientemente dentro de la política pública”, agregó Durán.

Otro tema de discusión fue el avance en la garantía de los derechos de los niños, niñas y adolescentes del país. Se concluyó que existe un progreso, pero no lo suficiente. “Hay una tendencia a la mejoría pero esta es asimétrica, es decir, los que están en la mejor condición con mejores posibilidades han mejorado mucho más que los que están más abajo. Entonces, todos mejoran, pero no en la misma cantidad, y esto es particularmente evidente en regiones críticas como La Guajira, algunas zonas del Meta, ciertas poblaciones del Vichada, comunidades indígenas y afro”, afirmó Durán.

Los retos

En el encuentro se destacó el tema de la paz y el posconflicto como un escenario que ofrecerá oportunidades para que se dé un diálogo en otros sectores de la sociedad. De igual forma, se señaló el gran reto del momento: reposicionar los temas de la infancia y la adolescencia en la agenda pública. “Se concluyó que se ha ido perdiendo terreno en el debate público de estos temas y se hizo evidente en las recientes elecciones locales en las que no se discutió lo suficiente, y es papel de todos reposicionarlo en la agenda”, explicó Durán.

Finalmente, Ember Estefenn Rodríguez, director de Niñez y Adolescencia del ICBF, presentó el documento del convenio que está entidad tiene con la Alianza por la Niñez Colombiana, para la construcción de instrumentos que permitirán diseñar la política nacional de infancia y adolescencia.

Del coloquio, al que asistieron cerca de 200 personas entre funcionarios públicos de entidades nacionales y locales, estudiantes, académicos y representantes de diferentes ONG, se publicará entre marzo y abril de 2016 un compilado con las conclusiones más relevantes y una serie de reflexiones de los conferencistas que hicieron parte.

Como punto positivo se vio el hecho de que haya participado un número importante de jóvenes, un equipo humano con comprensión de la situación de la infancia y adolescencia, comprometido con sus derechos y con la posibilidad de ser agente de cambio.